El académico investigador postdoctoral de la Escuela de Kinesiología de la Universidad Finis Terrae, Dr. Mario Núñez-Lisboa, obtuvo el segundo lugar en la categoría póster del II Congreso Internacional del Instituto de Ciencias del Ejercicio y la Rehabilitación (ICER), organizado por la Universidad Andrés Bello. El jurado otorgó el reconocimiento por su investigación “SPINAL TSDCS MODULATES TRUNK POSTURE AND SPINAL OUTPUT DURING GAIT IN AGING”, presentada el 27 y 28 de noviembre.
El estudio, que corresponde al capítulo final de su tesis doctoral, analiza una intervención de neuromodulación para observar su efecto en la postura y control motor durante la marcha en personas mayores. Esta temática se inserta en un congreso que reunió a investigadores, clínicos y profesionales de diversas áreas para abordar evidencia aplicada y transferencia de conocimiento.
El Dr. Núñez-Lisboa explicó que esta investigación “trata sobre el efecto de una neuromodulación en la que ocupamos una técnica llamada TSDCS, que es una estimulación directa en la espalda. Específicamente, utilizamos una configuración catodal”. Su trabajo evaluó diferencias en la activación neuromuscular de adultos mayores durante la marcha y analizó cómo esta técnica puede modular dichas respuestas.
Además, el investigador señaló que “durante el proyecto fuimos observando que los adultos mayores, al caminar, tienen una activación particularmente distinta a la de los jóvenes. Entonces, ellos tienen un control diferente, y este control está exacerbado en zonas que no lo están en los jóvenes”. La neuromodulación aplicada permitió reducir esas alteraciones y aproximar el comportamiento motor a patrones observados en adultos jóvenes.
Participación en el congreso
El Dr. Núñez-Lisboa presentó su trabajo en formato póster en el congreso organizado por la Universidad Andrés Bello, una instancia orientada a la rehabilitación y la neurorehabilitación, donde su investigación se alineó plenamente con los objetivos del encuentro.
Respecto al valor de estos espacios para difundir el trabajo de la Finis Terrae, afirmó que “son instancias súper relevantes. La discusión científica y la socialización de nuestros temas, no solo de manera interna sino también externa, es clave para tener un feedback de lo que estamos haciendo y, además, para abrir oportunidades de nuevas colaboraciones”. Agregó que su participación le permitió conocer de manera más directa la investigación que se desarrolla en el país.
Sobre los pasos futuros, el académico explicó que “nuestro equipo describió y evidenció este beneficio a través de la neuromodulación, y ahora buscamos desarrollar intervenciones que permitan avanzar hacia un modelo ideal aplicado al adulto mayor”. Y esas intervenciones quiero postularlas el próximo año a diferentes fondos, como FONDECYT y otros fondos nacionales”. Su objetivo es avanzar hacia intervenciones continuas con personas mayores, integrando neuromecánica y ejercicio físico.
En relación con el potencial impacto en salud pública, comentó que “nuestra apuesta es ser más específicos en la prescripción, y en este caso a través de la marcha misma. ¿Por qué la marcha? Porque es la acción motriz más representativa de la autonomía del adulto mayor”. Este enfoque busca contribuir a recomendaciones más precisas en torno a la movilidad y la prevención de la fragilidad.
Finalmente, sobre el reconocimiento obtenido, señaló que “es una consolidación de las ideas que veníamos trabajando desde 2021, tratando de entender cuál era la mejor forma de abordarlas. Es muy significativo, personalmente, porque me reafirma que este es el camino y hacia acá debemos avanzar”.